El mercado laboral enfrenta un serio problema: el edadismo, que resurge con debates sobre el subsidio por desempleo. Los datos confirman la dificultad para emplear a personas mayores, quienes conforman la mayoría de los beneficiarios de este subsidio. ¿Qué ocurre cuando no hay oportunidades laborales?
Reforma y visiones enfrentadas
La reforma del subsidio por desempleo genera desacuerdos en el Gobierno. La Ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, busca expandir la protección a mayores de 45 años sin cargas, aumentando el número de beneficiarios y el monto, actualmente en 480 euros. Por otro lado, la Ministra de Economía, Nadia Calviño, aboga por endurecer estas ayudas, argumentando que pueden desmotivar la búsqueda de trabajo.
Realidad del mercado laboral
Los datos de desempleo reflejan la dificultad para personas de 50 años en adelante. Representan un 29% del total de desempleados y más del 43% de los desempleados a largo plazo, con más de un año sin trabajo. Esta realidad afecta a un tercio de la población activa total en España, un grupo desaprovechado y marginado por el mercado laboral.
Los mayores y los subsidios por desempleo
Los mayores de 52 años son los principales receptores de estas ayudas, representando el 61,4%. Este grupo ha experimentado un aumento significativo desde 2019, y aproximadamente el 39% de todos los beneficiarios supera los 55 años. Sin embargo, se encuentran en una situación complicada debido a la falta de ofertas laborales y contratos temporales.
Conclusión
El debate sobre el subsidio por desempleo tiene un impacto significativo en un grupo de personas mayormente excluido del mercado laboral y afectado por la falta de oportunidades. Los cambios propuestos podrían empeorar su situación, evidenciando la problemática del edadismo laboral en España.
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