Los 100 metros lisos son la prueba más destacada del atletismo. En unos 10 segundos, se decide quién es la persona más rápida del mundo, tanto en la categoría masculina como femenina.
Usain Bolt estableció el récord mundial actual el 16 de agosto de 2009. Durante el Mundial de Atletismo en Berlín, paró el reloj en 9,58 segundos. Esta marca sigue siendo inigualable 15 años después.
El récord olímpico también pertenece a Bolt. En los Juegos Olímpicos de Londres 2012, superó su propio récord con un tiempo de 9,63 segundos. Anteriormente, en los Juegos de Pekín 2008, había registrado 9,69 segundos, celebrando antes de cruzar la meta.
Bolt dominó la escena mundial, dejando atrás a sus rivales. Su superioridad quedó inmortalizada en una foto icónica de su carrera en Pekín, donde sus competidores apenas aparecían en la imagen.